Adaptabilidad y su importancia en el ámbito laboral

El constante cambio que existe en el entorno empresarial y el nivel competitivo en aumento tanto a nivel nacional como internacional genera que las empresas busquen mejoras continuas, adaptando nuevos esquemas de manera interna y/o externa, que promuevan la participación del personal, en las acciones empresariales. Con la finalidad de identificar fortalezas y debilidades, desarrollando estrategias para lograr competir con efectividad y calidad en los mercados nacionales e internacionales.

Es así que buscan contratar empleados que sean capaces de adaptarse y cumplir con dichas expectativas. Pero que sucede con los trabajadores ¿Cómo reaccionan los empleados a dichos cambios? ¿Las empresas realizan acciones que los ayuden a adaptarse a los nuevos esquemas? y ¿Cómo influye en el desempeño laboral de los empleados?

Adaptabilidad y su importancia en el ámbito laboral

¿Qué se entiende por adaptabilidad?

La RAE define adaptar(se) como: Acomodar(se) o ajustar(se) a algo o a alguien, haciendo las modificaciones oportunas.

La adaptabilidad laboral es la Capacidad interpersonal que tiene el empleado para ajustarse a los cambios internos o externos de nuestro entorno para así fluir entre situaciones difíciles.

¿Qué importancia tiene que el empleado tenga un alto nivel de adaptabilidad?

Las organizaciones son medidas por calidad, productividad y rentabilidad, sin embargo, cuando queremos analizar los resultados de la organización, medir su clima laboral y evaluar el rendimiento y la satisfacción de los empleados determinará en gran medida esos resultados. Si se logra esa adaptación y se consiguen los objetivos, la empresa se considerará eficaz y podrá crecer y sobrevivir.

La adaptación varía de una persona a otra y puede variar de un momento a otro en un mismo individuo. El mayor obstáculo que se encuentra es la resistencia al cambio ligada a la personalidad, al sistema social, al modo de implementación del cambio, el tiempo y los medios proporcionados para integrar el cambio, así como la credibilidad del agente de cambio. 

Todo lo mencionado resulta ser la causa más común de la rotación y deserción de personal en las empresas y no es por falta de aptitudes o competencias para desempeñarse eficientemente, sino por la dificultad para adaptarse a las condiciones de trabajo, a la organización, al cargo, al jefe, a los compañeros de trabajo o al entorno laboral, lo que a su vez afecta la productividad, la calidad y la rentabilidad de la organización.

Si estas condiciones de trabajo se presentan de forma inadecuada, dificultando la adaptación del individuo, podemos decir que estamos en presencia de factores de riesgo psicosociales, los cuales pueden generar diversas patologías asociadas al estrés laboral, trastornos comportamentales, trastornos de personalidad, entre otros y eso afectará directamente la satisfacción y el rendimiento laboral.

Recomendaciones para conseguir una adaptación efectiva


La empresa debe generar un ambiente de respeto y sana convivencia, donde la comunicación sea efectiva en todas las áreas y los empleados en sus diferentes niveles, las normas sean claras, se respeten las jerarquías y conductos regulares, los trabajadores conozcan sus funciones, derechos y responsabilidades, los ascensos, promociones y reconocimientos se otorguen por méritos, el bienestar y la seguridad de todos los trabajadores sea una prioridad para la organización, se cuente con un programa de capacitación y desarrollo personal que le permita a los trabajadores potencializar sus competencias y se valore a cada persona como parte fundamental para alcanzar el éxito de la organización.

 

Por otro lado, es importante que en el proceso de contratación de deben aplicar las herramientas necesarias para hacer una contratación por competencias en donde los nuevos elementos cuenten con los conocimientos, habilidades, actitudes y aptitudes que se acoplen a las directrices de la empresa.

 

Una buena adaptación denota “Salud Mental” (sentirse bien consigo mismo, sentirse bien con respecto a los demás y ser capaz de enfrentar por sí mismo las exigencias de la vida). Algunos consejos que te ayudaran en dicho proceso son: 

  • Identifica de qué tratan los cambios y analiza tus posibilidades para adaptarte a ellos.

  • Se flexible. Si durante un proceso un proceso de adaptación nos aferramos a ideas o estrategias tradicionales, no dejaremos espacio para desarrollar nuevas habilidades.

  • No digas que es imposible. Si alguien lo ha logrado, también tú puedes, si nadie lo ha hecho antes entonces tú serás el primero, así de simple.

  • Establece metas específicas. Enfócate en pequeñas metas que te permiten avanzar.

  • Mira el lado bueno. Hacerlo nos alentará a continuar con los cambios.

  • Se pondrá difícil, no te rindas. No dejes que la frustración y los miedos te consuman, date tiempo para aprender y acostumbrarte a tu nuevo entorno.